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La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Educación, confirmó ayer a los responsables de la escuela rural de Lago, en Valdoviño, el cierre del centro para el próximo curso.
Los padres de los seis niños que habían cursado la matrícula en el centro manifestaban ayer su sorpresa ante la decisión tomada por la administración autonómica con respecto a la escuela. Es más, las familias aguardaban desde hace meses a que les confirmaran una entrevista con la Jefatura Provincial para solicitar la implantación en el colegio del primer ciclo de Primaria, lo que permitiría escolarizar también en Lago a niños de seis años. La petición, se sostiene, según los padres, dado el interés de muchos progenitores de que sus hijos sigan recibiendo clases en una escuela rural.
Las familias afectadas no entienden la decisión de la Xunta, sobre todo porque ya hay matriculados en el centro cinco niños, y otro con un traslado de matrícula en curso. Es más, los progenitores recuerdan que cuando se empezaron a impartir clases solo se matricularon en las mismas cuatro niños.
Los padres de los cinco niños lamentaban ayer que la Xunta hubiese esperado hasta el último día de clase para comunicar el cierre del centro, algo que no esperaban. Una de las afectadas explicaba que no tenían confianza en que les concedieran el primer ciclo de Primaria, pero que en ningún momento se les había pasado por la mente que cerrarían la escuela. “E agora que podemos facer cos nosos fillos, temos que buscarnos a vida, xa que non sabemos onde os poderemos matricular, nin onde teremos prazas, nin nada”, manifestaba una de las madres.
El colectivo no descarta emprender movilizaciones. Por el momento, cuentan con el respaldo del personal de todo el centro, de vecinos y también del alcalde, José Antonio Vigo, quien ya se había comprometido días atrás con los padres de los pequeños a pedir una entrevista con responsables de Educación en la Xunta para solicitar el primer ciclo de Primaria. La situación ahora es radicalmente distinta, pero, aún así, el apoyo del primer edil valdoviñés se mantiene, según confirmaron las madres.
El colectivo desconoce también qué criterios se tienen en cuenta a la hora de cerrar un colegio, sobre todo teniendo en cuenta que se ha permitido matricular a cinco niños que ahora desconocen en qué centro podrán cursar sus estudios el próximo año.
El responsable del PSOE local, Alberto González, confía en que no se trate de una decisión firme, y alude a la reducción de plazas en educación pública, algo a lo que se oponen desde el partido.
